jueves, 27 de noviembre de 2008

La eficiencia tiene un arquetipo

(Va por ti, Juan)
¡¡Tengo gambas, tengo chopitos, tengo jamón!! Tengo unas gafas sencillas, mucha barba, apenas tocada por cuchilla o maquinilla. Tengo un horario machacón, que no es excusa para emplearme a fondo en cualquier momento del día...
También tengo una barra llena de pinchos, bocadillos, garrotes (en pamplonés), curasanes (en ribero), conos chocolateados, chocolatinas con forma de cono, de barra y de triángulo.
Tengo dos con leche, un cortao, tres solos con sacarina y un largo americano que realmente no tengo, pero que, si te apetece, pues te lo preparo.
Tengo veinte minutos de tiempo para leer el periódico por la mañana, antes de ponerme detrás de la barra.
Tengo un nombre bíblico, de apóstol, de rima fácil por ser el número 'one one'... un humor fenomenal, un catálogo de bromas hechas al pelo para tudelanos, tafalleses, baztaneses, oteizanos, estellicas, madrileños, valencianos y andaluces.
Tengo una velocidad terrible tomando nota, sirviendo, cobrando, calculando las vueltas, intuyendo la calderilla que me puede dar el cliente. Ese cliente que, aunque yo posea muchas cosas, siempre tiene la razón.

1 comentario:

Jurdan dijo...

Y un aguante del copón.